En cualquier tienda retail, el recorrido del cliente no es casual. Cada paso que da, cada producto que ve y cada decisión de compra está influenciada, en gran medida, por cómo está distribuido el espacio. En este contexto, los exhibidores cumplen un rol estratégico: guían la atención del consumidor, determinan zonas de permanencia y potencian tanto la experiencia como las ventas. Hoy en Promargon abordaremos cómo el diseño y ubicación de los exhibidores puede transformar el recorrido del cliente dentro de tu negocio.
El recorrido del cliente: un elemento clave en el diseño comercial
El recorrido del cliente, también conocido como “customer flow”, hace referencia al camino natural que sigue una persona dentro del establecimiento. Este flujo puede ser estimulado o condicionado por varios factores, siendo el mobiliario uno de los más influyentes.
En supermercados, farmacias y tiendas de conveniencia, los exhibidores bien ubicados ayudan a generar un flujo coherente y eficiente, evitando zonas muertas, reduciendo la congestión y favoreciendo la exposición de productos clave.
El rol estratégico de los exhibidores
Lejos de ser elementos únicamente funcionales, los exhibidores son herramientas de comunicación visual que impactan en la forma en que el cliente interactúa con la tienda. Su diseño, altura, ubicación y orientación pueden:
- Dirigir el tránsito hacia áreas específicas de interés.
- Aumentar la exposición de productos de compra impulsiva.
- Estimular la exploración del punto de venta.
- Generar pausas dentro del recorrido para incentivar decisiones de compra.
Por ejemplo, los exhibidores de cabecera (frentillos) o end caps son ideales para captar atención inmediata, mientras que los exhibidores bajos pueden facilitar la visibilidad general del espacio sin interrumpir el flujo.
Diseño y ubicación: dos claves del éxito
No se trata solo de tener buenos exhibidores, sino de ubicarlos estratégicamente. Algunos principios básicos a tener en cuenta incluyen:
- Inicio del recorrido: colocar productos llamativos o promociones en la entrada genera un primer impacto positivo.
- Pasillos principales: utilizar exhibidores lineales y bien organizados ayuda a mantener el orden y facilitar la navegación.
- Zonas calientes: aprovechar los puntos de alta circulación para colocar exhibidores con productos de rotación rápida.
- Cierre del recorrido: las áreas cercanas a caja son ideales para exhibidores de impulso con productos pequeños o complementarios.
Más allá de la estética: eficiencia operativa
Además del impacto visual, un buen exhibidor debe ser resistente y funcional. Los exhibidores metálicos de alta resistencia aseguran estabilidad, durabilidad y adaptabilidad al movimiento constante del retail. Esto permite no solo organizar mejor el espacio, sino también mejorar la eficiencia del personal y facilitar las tareas de reposición.
El recorrido del cliente no es improvisado: es una herramienta estratégica que puede ser optimizada con el mobiliario adecuado. Invertir en exhibidores bien diseñados y correctamente ubicados mejora la experiencia de compra, incrementa la exposición de productos y, en consecuencia, potencia las ventas.
En Promargon, diseñamos y fabricamos exhibidores metálicos resistentes y funcionales, pensados para adaptarse a las necesidades del retail moderno. Nuestro mobiliario está creado para acompañar y potenciar cada paso del cliente dentro de tu tienda.
